Juan Carlos Vázquez, oriundo de Iquique, y Leonel Olivares, de Alto Hospicio, sacaron la cara por la región con propuestas de asesoría financiera y un servicio de pintura para todo tipo de superficie.
De Iquique y Alto Hospicio provienen los tres emprendedores de la región de Tarapacá que triunfaron en el concurso “Impulso Chileno», iniciativa de la Fundación Luksic que en alianza con la Corporación Simón de Cirene y la Escuela de Administración UC, premió por primera vez a 200 postulantes de todo el país y entre quienes se repartirán un fondo de hasta 1.000 millones de pesos.
En esta IV versión participaron más de 14 mil emprendedores. El 55% de los ganadores son mujeres y el 62% es de regiones.
“¡Queremos decir con fuerza que creemos en los emprendedores de Chile! Con esta nueva edición ya sumamos 420 ganadores de Impulso Chileno y estamos orgullosos del trabajo que hacen cada uno de ellos. Esperamos que puedan seguir creciendo, generando puestos de trabajo y cumpliendo sueños en todo el país”, dijo Andrónico Luksic, fundador del programa Impulso Chileno.
Tarapacá sacó la cara por la región con tres emprendimientos que van desde la asesoría financiera a través del ordenamiento de datos y pago de impuestos hasta el servicio de pintura para todo tipo de superficies.
Uno de los problemas que todos en algún momento deberemos enfrentar es el orden de nuestras finanzas y observando en esta necesidad una oportunidad es que Juan Carlos Vásquez Canavides decidió emprender con su propia oficina contable donde entrega asesorías y prestación de servicios en ordenamientos de datos y pago de impuestos al que llamó JVASQUEZ SPA.
Nació en el Altiplano, en el pueblo de Chiapa comuna de Huara, pero se reconoce todo un iquiqueño de crianza, ya que fue en Iquique donde creció y realizó su trayectoria profesional como Contador Público Colegiado, hasta que en 2018 decidió emprender. “Vislumbré la necesidad de hacer mi trabajo desde un punto de vista de empresa y ofrecer asesorías más integrales hacia ellas”, detalla.
Como contador independiente, y aprovechando sus años de trayectoria, Juan Carlos comenzó a atender a diversos clientes que requerían ordenar sus finanzas, mejorar su sistema de contabilidad, informática, además de prestar asesorías tributarias y de Recursos Humanos, ya que la contingencia y la pandemia habían acrecentado la carga de trabajo y las empresas necesitaban apoyo en este nuevo escenario de flexibilización laboral.
Su aterrizaje a Impulso Chileno fue por casualidad. “Un cliente me pidió ayuda para postular y así fue como me nació la inquietud de hacerlo también yo”, recuerda.
Hoy Juan Carlos trabaja con cuatro asistentes contables y siente una gran satisfacción de haber ganado este concurso de emprendimiento que le permitirá arreglar su oficina, para que sea más moderna y mejor equipada para atender a sus clientes.
Otro de los emprendimientos ganadores es el de Leonel Olivares, de Alto Hospicio, quien conquistó al jurado de Impulso Chileno con su servicio de pintura para todo tipo de superficie. El emprendimiento lleva su nombre “LEONEL” y a través de él, este emprendedor ha remozado las fachadas de iglesias, negocios, empresas.
Su idea de emprender surge de la mano de su hijo, quien después de ver a su padre trabajar por 30 años como pintor y arenador para una empresa, lo animó a independizarse y ser su propio jefe.
Leonel recuerda que siempre hacía todo el trabajo; “llegaba mi jefe ponía una firma y eso era. Entonces mi hijo, que ya había salido del colegio y era mecánico, me dijo: ¡papá ya es hora que te independices!”. Fue así que con su ayuda compré un compresor, el equipo para arenar, y ahí empecé con mi pyme”, detalla.
Y es que después de la compra de su primera máquina, en 2014, el negocio floreció y hoy ya cuenta con tres compresores y espera adquirir otro artefacto con mayor capacidad, con más potencia. “Esta nueva máquina me ayudará mucho porque me han llegado trabajos que son grandes y con ella podré maximizar el tiempo y dinero”, precisa.
Pese a postular a diversos fondos públicos obteniendo resultados que le fueron adversos, Leonel siguió concursando y así fue cómo llegó a ser uno de los 200 ganadores de Impulso Chileno. “Gracias a Dios me fue bien. El premio se debió a mi perseverancia”, explica este arenador y pintor, que se forjó a pulso, y hoy ya es un orgulloso emprendedor.
El tercer ganador de la región es Carlos Jimenes quien, con su emprendimiento “Fix motors”, presta servicios de mantención, reparación y venta de repuestos automotrices en Alto Hospicio.
Los 200 emprendedores ganadores recibirán financiamiento, de entre 3 y 5 millones de pesos; acompañamiento académico con clases dictadas por la Escuela de Administración de la Pontificia Universidad Católica de Chile y mentorías personalizadas, a cargo de Simón de Cirene.
