Los acusados se concertaron para dar muerte a otro integrante del grupo delictual, tendiéndole una trampa para así emboscarlo y dispararle. La víctima recibió dos disparos, perdiendo una de sus piernas.
Con la prueba presentada por la Fiscalía de Alto Hospicio, el tribunal oral en lo penal resolvió condenar a penas entre 15 y 10 años y un día de presidio a cinco miembros de una banda criminal, por su participación en el homicidio frustrado de un joven ocurrido el año 2020.
En el juicio oral la fiscal jefe Virginia Aravena logró acreditar que en abril de 2020, el acusado J. M. O., integrante de la banda delictual «Los Juanitos», decidió dar muerte a la víctima, que también formaba parte de la banda. Para ello acordó con otros miembros del grupo delictual tenderle una trampa para así poder emboscarlo y dispararle. En efecto, envió un video a la víctima en el que aparecía él en compañía del acusado C. G. R. portando armas de fuego y amenazándolo de muerte.
Posteriormente el afectado recibió un mensaje del acusado R. Z. S., también integrante de la banda que estaba en la cárcel, quien le ofrecía prestarle una pistola que tenía guardada su hermano para que se defendiera. Además R. Z., concertado con M. O., contactaron al acusado N. O. L., otro miembros del grupo, para que llevara a la víctima hasta el lugar donde supuestamente le entregarían el arma.
Así, el 20 de abril, aproximadamente las 11:00 horas, el afectado llegó hasta la ruta A616 a bordo de un vehículo conducido por O. L., frente al terminal de buses de la línea Uno, lugar elegido previamente por la banda para el encuentro por cuanto habían verificado que las cámaras del lugar apuntaban hacia otra dirección. Allí llegaron en un vehículo los acusados J. M., C. G. y J. M. O. portando armas de fuego, por lo que la víctima corrió hasta el interior de una vulcanización, donde J. M. le disparó en a lo menos dos oportunidades, impactándole en ambas piernas. Al acercarse al afectado que ya estaba en el suelo lo registraron, le sustrajeron su celular y su billetera, se sacaron las mascarillas y M. O. le gritó…»te dije que te íbamos matar, hijo de perra».
Posteriormente los acusados abordaron sus vehículos y se retiraron del lugar. A raíz de los impactos balísticos la víctima resultó con una fractura expuesta del fémur derecho, con lesión de la arteria femoral derecha y con necrosis muscular que requirió la amputación de la pierna derecha, todas lesiones de carácter graves gravísimas que hubieran sido mortales de no haber mediado atención médica oportuna.
En el juicio declaró la víctima que está detenido por otro delito, y los funcionarios de la Brigada de Robos de la Policía de Investigaciones que estuvieron a cargo de las diligencias que permitieron reunir las pruebas para acreditar la participación de los acusados, en especial el análisis de cámaras de vigilancia del lugar y de las conversaciones entre los miembros de la banda que estaban interceptados, ya que eran investigados por delitos de robo.
Terminado el juicio, el tribunal resolvió condenar a J. M. O., C. G. R. y R. Z. S. a la pena de 15 años de presidio; a N. O. L. a 12 años de presidio, y a J. M. O. a 10 años y un día de presidio, todos como autores del delito de homicidio frustrado.
