Clery L. Neyra, Vicerrectora de Transformación y Nuevas Soluciones de AIEP
«Cuando el ritmo de cambios dentro de la empresa es superado por el ritmo de cambios fuera, el final está cerca.» Con esta frase, Jack Welch, ex CEO de General Electric, intentaba explicar el mundo actual en el que se desarrollan las empresas. Un contexto caracterizado por cambios constantes que generan multiplicidad de efectos para una sola causa. Sin embargo, saber que algo es incierto no ayuda mucho, lo importante es saber cómo las organizaciones resuelven sus nuevos desafíos, implementando procesos de adaptación que pueden ser potenciados por tecnologías como la red 5G.
Podríamos pensar que las mejoras planteadas por esta nueva generación de redes inalámbricas vendrán solo del rubro de las telecomunicaciones, pero lo cierto es que en el mediano plazo veremos el incremento de otras tecnologías que se volverán más accesibles, ofreciendo la posibilidad de incrementar el rendimiento de las organizaciones.
El 5G trae todas las acciones disponibles en el 4G, pero con una velocidad mucho más alta, más dispositivos conectados al mismo tiempo, mejores microprocesadores de imágenes, etc. La diferencia entre 4G y 5G propone un aumento del uso de radiofrecuencias que darán soporte a un mayor tráfico de datos menos saturados. La velocidad es otro eje que se verá potenciado por la red 5G gracias al incremento del ancho de banda, que se refiere a la cantidad de datos moviéndose en una sola red al mismo tiempo. Si queremos hacer un comparativo, el 5G es 20 veces más rápido porque permite acceder a una velocidad de descarga de 20 gbps, a diferencia del 4G, que solo permite hasta un gbps.
Entre los aspectos más esperados encontramos la capacidad de adaptación a más dispositivos sin causar interferencia. No solo se adaptará a los smartphones, sino también a todos aquellos objetos conectados gracias al Internet de las Cosas (IoT)
Los beneficios del 5G serán visibles para todos los sectores como el entretenimiento, la agricultura, la salud, la educación, el turismo, sistemas de transporte, energía, e incluso en sectores públicos como la seguridad ciudadana.
Más allá de democratizar el acceso a nuevas tecnologías o contar con mayor ancho de banda y conectar más dispositivos, los beneficios del 5G generan un cambio tremendo de paradigmas dentro de las organizaciones, porque no tendrán que operar aisladamente, sino como parte de un sistema de tráfico de datos mucho más grande y potencialmente conectado.
¿Cómo el 5G potenciará la educación? En los últimos dos años la tecnología ha demostrado ser fundamental en el ámbito de la educación. Nos ha ayudado a superar la crisis de la pandemia. En el campo de la innovación, se han desarrollado una serie de nuevas metodologías educativas que propician un ecosistema virtuoso, facilitador del progreso y cuya adaptación será más factible gracias a la cobertura 5G.
En AIEP estamos enfocados en generar educación de calidad que aproveche al máximo la red 5G. Por ello se han implementado laboratorios, formatos flexibles para la educación online y herramientas para desarrollo de plataformas de videoconferencias que propicien una serie de interacciones mucho más ricas que los sistemas tradicionales. Estamos preparados para aprovechar los beneficios del 5G, sabemos que nos brindará una baja latencia con la cual podremos generar experiencias inmersivas fluidas.
Tenemos el desafío de liderar, de manera integral, la transformación de AIEP, habilitando soluciones para enfrentar los nuevos desafíos y oportunidades que nos traza la educación actual y del futuro.
