Pedro Oróstica C
La presente crónica surge a propósito de la reciente visita que el senador ha realizado al
Departamento de Potosí, Bolivia. Esto, dada la invitación cursada por el Municipio de
Uyuni, con ocasión de la Conmemoración del 134° Aniversario de esa ciudad. En esta
oportunidad, fue objeto de reconocimiento como Huésped de Honor, de acuerdo a la
Resolución Municipal N°0102/2023 del Concejo Municipal de Uyuni. Esta Resolución lo
cataloga como “visionario en materia de integración”, lo que considera las más de tres
décadas de gestión para unir Uyuni – Hito 60 en la frontera chilena boliviana. Ello,
imbuido en la idea de establecer nexos integrativos a través de carreteras bioceánicas
entre ambas naciones desde el norte de nuestro país, Chile.
Municipios bolivianos
Estas innovadoras y tempranas ideas, desde un inicio estuvieron dirigidas hacia la
integración sudamericana en general y de Bolivia en particular. Los medios para este
objetivo fueron la creación de estas carreteras o rutas logísticas y cuya gestión le han sido
reconocidas internacionalmente. Así lo demuestra esta visita a Uyuni, donde a la vez que
participó en las actividades del aniversario, fue invitado por autoridades y población de
las localidades de Rio Grande, San Juan del Rosario, pertenecientes al municipio de
Colcha K, y San Pedro de Quémez, del municipio del mismo nombre. Estas localidades
constituyen hoy los epicentros productivos del litio del país vecino, pábulo por el cual su
salida natural es el puerto de Iquique para su envío a los mercados internacionales. Esto
ha incidido, también, en la terminación de esta ruta hacia la frontera con Chile, en
Tarapacá.
Pavimentación Uyuni – Hito 60
Las esperanzadoras expectativas que las autoridades y pobladores manifestaron en estos
encuentros, se debe a la próxima pavimentación que el gobierno boliviano ha anunciado
ejecutar desde Uyuni hasta Hito 60 en la frontera con Chile. El proyecto de la
Administradora Boliviana de Carreteras se encuentra plenamente diseñado y con recursos
adjudicados. De tal modo, que este tramo que forma parte del denominado Corredor
Central, queda integrado a este troncal que une los océanos Atlántico y Pacífico y conecta
al puerto de Paranaguá con el puerto de Iquique. Con este tramo de 250 kilómetros
pavimentados se apoya el tránsito vehicular de todo el sur boliviano. Esta es la
importancia que estas localidades le otorgan a la gestión integrativa realizada por Soria,
desde los tiempos en que era alcalde de la ciudad de Iquique.
Una estrategia incluyente
Estos propósitos de consolidar unión productiva entre ambos países, también se
encuentran registrados en la historia y cultura tarapaqueña. Y es aquí donde se destacan
las tempranas gestiones paradiplomáticas iniciadas en la década del 60’ del siglo pasado,
desde el municipio iquiqueño. Estas, se llevaron a efecto no solo para unir a estos dos
países, sino también, incluir a Paraguay, Brasil, Argentina, en el contexto de los
denominados corredores bioceánicos en el cono central sudamericano. Esto último, a
partir del retorno a la democracia en Chile, cuando Soria el año 1992 vuelve a ser
reelegido alcalde de la ciudad. Una de estas rutas es el Corredor Bioceánico Central, que
como se sabe, conecta territorios chilenos, bolivianos, paraguayos y brasileños. Esta ruta
no ofrece los escollos naturales propios de la cordillera de Los Andes, dado que frente a
Tarapacá desaparece. Un hándicap geográfico extraordinario.
Corredor Central
Este corredor atraviesa los territorios de estos cuatro países y, para quedar final y
oficialmente operativo, se requiere aún: 1. la pavimentación de este tramo de suelo
boliviano, Uyuni – Hito 60. 2. la terminación del puente que une Puerto Murtinho, en
Brasil con Carmelo Peralta en Paraguay. 3. la finalización de la carretera paraguaya entre
Loma Plata y Pozo Hondo. 4. el asfaltado de 24 kilómetros en territorio chileno entre Hito
60 y Ujina. Cumplidas estas obras, esta ruta que une directamente los puertos de Iquique
en el Pacífico y Paranaguá en el Atlántico, queda habilitada para un productivo y
sostenible uso. Queda esperar las decisiones centrales al respecto.
Participación chilena en el Corredor Central
Con relación a la participación de Chile en este contexto logístico bioceánico productivo
sudamericano, les corresponderá, entonces, a la Cancillería autorizar la apertura de Hito
60 como paso internacional; a la Dirección Nacional de Aduanas implementar servicio en
Hito 60 y al Ministerio de Obras Públicas a través de Vialidad, la pavimentación o asfaltado
de los 24 kilómetros entre Hito 60 y Tenencia de Ujina. Este tramo empalma directamente
a la carretera Inés de Collahuasi, llega a Pozo Almonte en la Ruta A-5 y desde allí al puerto
de Iquique. Es de esperar que, estas instancias puedan actuar en concordancia y con la
premura que se requiere frente a la habilitación de este nuevo paso fronterizo entre Chile
y Bolivia. De ahí la importancia que revestirá el próximo Comité de Fronteras entre ambas
naciones.
Corredor Central y puerto.
En complemento, entonces, corresponderá a su vez, al gobierno regional de Tarapacá, a la
Municipalidad, a Zofri, entre otros actores interesados en la sostenibilidad económica
para la región, considerar y sopesar infraestructuras viales de acceso al puerto de Iquique
como obras necesarias y fundamentales en el porvenir regional. Además y sobre todo,
extender y profundizar sus actuales frentes de atraques, como así mismo, la construcción
de nuevos sitios, los cuales poseerán profundidades de agua que no tienen otros puertos
chilenos. De ahí que, perfectamente puede ser el puerto de Iquique, el puerto que el
presidente Boris señaló que necesita Chile en el norte del país. Esto dado que, debe
hacerse previsible la necesidad de exportación e importación de Bolivia, Paraguay, Brasil,
Argentina, por el Pacífico en el siglo que avanza.
Conclusión
Han sido estas visitas realizadas por el senador Jorge Soria Q, a la ciudad de Uyuni y a las
localidades señaladas, lo que permitió evidenciar como estas gestiones paradiplomáticas
utilizadas tempranamente desde el municipio de Iquique, proporcionan bases para un
generalizado desarrollo regional sostenibles. Esta metodología, si bien no comprendida
suficientemente en las décadas anteriores, hoy es reconocida y practicada ampliamente
por los gobiernos de estos países. De ahí la necesidad para Tarapacá de incorporarse a la
operatividad de la red de corredores bioceánicos existentes en este territorio del cono
central sudamericano.
Es este Corredor Central, el que parte en Brasil, atraviesa Paraguay y Bolivia para entrar a
Chile por Hito 60. Constituye la ruta más recta y corta al Pacifico, por y para lo cual, la
capital regional debe contar con un puerto que satisfaga las futuras demandas de los
centros productivos de estos países. Es de esperar que Bolivia acuerde políticas con Chile,
Paraguay, Brasil y Argentina, que flexibilice su anterior postura de no facilitar el paso del
transporte de estos países al puerto de Iquique y a los puertos del norte de Chile a través
de su territorio.
