Hemos visto los últimos días como la disputa judicial sobre la subdivisión de predios rústicos
que el Gobierno está llevando contra un recurso de protección claramente mal interpuesto
acapara las miradas, mientras que el verdadero tema de fondo se sigue evitando, y las
promesas de un nuevo proyecto de ley que regule esta materia y permita la habitabilidad
rural aún no llegan.
Si queremos frenar la parcelación desmedida, evitar los procesos judiciales innecesarios y, a
la vez, fomentar la descentralización, necesitamos legislar de manera urgente, no olvidemos
que prácticamente un 90% de la población vive en ciudades y que más del 80% de nuestro
país es rural.
La vida en el campo puede traer nuevas oportunidades e instalar una economía basada en la
naturaleza, en la salud y en la felicidad de las personas. Pero esto no se logrará con
desarrolladores mal asesorados interponiendo recursos de protección, ni tampoco con
promesas legislativas incumplidas. El futuro rural de nuestro país es el legado más
importante que le dejaremos a nuestras futuras generaciones.
Diego Varela C.
Socio fundador de Biósfera Austral