Por Rodrigo Vargas Briones, Seremi de Gobierno de Tarapacá
Cuando la voz de la ciudadanía es escuchada por las autoridades y se unen esfuerzos para entregar soluciones a las necesidades que expresa una determinada comunidad es fundamental mantener el espíritu de la participación ciudadana no sólo en la identificación de ese problema, involucrando a las dirigencias sociales en las diferentes etapas mientras avanzan los proyectos.
Tal es el caso del teleférico Alto Hospicio – Iquique, que tras años de verse como un lejano horizonte ya se ven los pasos hacia su ejecución. Esta semana la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas en conjunto con los respectivos municipios están desarrollando las jornadas del proceso de participación ciudadana que acompaña a esta iniciativa.
Como Secretaría Regional Ministerial de Gobierno en Tarapacá colaboramos a través de nuestro equipo de la División de Organizaciones Sociales (DOS) en la invitación a dirigentes juntas de vecinos, uniones comunales y clubes de adulto mayor de ambas comunas, sumándonos al llamado para que las opiniones de la comunidad puedan verse plasmadas en el proyecto.
Las jornadas de participación ciudadanas han sido denominadas “Casa Abierta, Exposición y Difusión”, cumpliendo tanto la función de informar a vecinas, vecinos y dirigentes sociales, así como también se dan los espacios necesarios para que puedan expresar sus observaciones como residentes y futuros usuarios de este nuevo método de transporte para Tarapacá.
En Iquique, junto al seremi de Obras Públicas, Juan Papic, el alcalde Mauricio Soria y representantes del gabinete regional como el seremi de Economía, la seremi de Deporte y la directora regional de Sernatur, estuvimos compartiendo con dirigentes y participando de un punto de prensa en el que se informó sobre el estado del diseño del proyecto, que ahora esperará el llamado a licitación por estudios de ingeniería y las obras de construcción.
El teleférico Alto Hospicio – Iquique tendrá una extensión de 5,5 kilómetros aproximadamente y tendrá tres estaciones de pasajeros, ubicadas en Los Cóndores, Alto Hospicio; Tadeo Haenke y Rotonda El Pampino, en Iquique. Su capacidad será de 2 mil personas por hora en cada sentido y se estima que el tramo se recorrerá en 16 minutos.
Con un costo preliminar de 130 millones de dólares, el proyecto no sólo resuelve un problema en materia de transporte, sino que se constituye también como un atractivo turístico para la región, que contará con una nueva infraestructura pública que seguramente será un punto de visita para quienes visiten Tarapacá, brindando la oportunidad de realizar el recorrido disfrutando una vista panorámica desde Alto Hospicio a Iquique.
Esperemos que este tipo de proyectos y la forma de trabajo mancomunado con las dirigencias sociales se mantengan en el tiempo, independientemente de los gobiernos de turno, para que las obras públicas tengan sentido y logren el impacto que la ciudadanía espera para responder a sus necesidades.