Para aquellos que llegan de vacaciones a Iquique y que prefieren el
turismo de intereses especiales, con acento en el patrimonio y la cultura,
las Salitreras Humberstone y Santa Laura, constituyen un destino natural.
Es que pese a las altas temperaturas, que superan los 30 grados en el
horario de mayor sol, las visitas no se detienen desde que el Sitio abre, a
las 09.00 hora, hasta su cierre, a las 18.00.

Tanto es así que sólo en las primeras tres semanas de este enero de 2023,
se registraron más de 6 mil visitas, con fuerte presencia de residentes de
la región, que llevan a sus familiares o amigos en vacaciones, hasta las
salitreras, principalmente Humberstone. Sin embargo, los turistas
extranjeros, tanto los que vienen en cruceros, en excursiones de moto
home y otras vías, también llegan a las salitreras.
Es el caso de dos caravanas de casas rodantes, con turistas del exterior,
que hicieron su parada en Salitrera Humberstone, dejando un novedosa
postal, al ingreso del Sitio. El jefe de Patrimonio de la Corporación Museo
del Salitre, Patricio Díaz Valencia, destacó la visita de ambas delegaciones,
que llegaron sin aviso a la salitrera Humberstone e iniciaron un largo
recorrido por sus instalaciones.
También destacó la llegada de turistas de cruceros, con el primer arribo
que se registró el 11 de enero a Iquique, del MV EUROPA. Un gran número
de los 266 pasajeros europeos, optaron por tomar los circuitos que
contenían la visita a las salitreras.
VISITANTES LOCALES
En estas primeras tres semanas las visitan son permanentes y no se
detienen. Algunos prefieren llegar a temprano, para eludir los fuertes
rayos solares y recorrer el sitio en su extensión, tanto salas temáticas
como la estructura al aire libre. Llama la atención la gran presencia de
niñ@ y adolescentes, que también se maravillan con la historia pampina y
lo que representó el ciclo del salitre.
Es el caso del niño Benjamín Leal, de Arica y que junto a sus padres
visitaba a sus familiares residentes en Iquique, quienes los llevaron a las
salitreras. “Me gusto porque hay muchas cosas entretenidas”, aunque
reconoció que las figuras monumentales, que son parte de la museografía
en algunas salas, le dieron “miedo”. Encontró que fue un gran panorama
familiar y recomendó que otros niños también visiten el Museo de Sitio.
Agustín Allendes, de 12 años y proveniente de La Serena, dijo que pensaba
que era un lugar pequeño, pero que se impresionó por su tamaño.
También invitó para que los niñ@s y jóvenes concurran al lugar
patrimonial, que cuenta una parte dura de la historia de nuestro país.
Ángel Lesman, que reside en Iquique hace 11 años, también concurrió en
familia. “Me ha gustado mucho em museo y veo que ha crecido mucho. Se
nota el avance del museo, es gigantesco y hay mucha explicación de lo
que muestra”.

Leslie Alvillar estaba en Humberstone junto a su hija Leonor. “Vivimos en
Iquique y ahora acompañamos a nuestros familiares que vienen de
Santiago. Esta es la cuarta vez que traemos familiares a Humbestone, para
que empapen de la historia de nuestro país y del norte”.
Su hija se impresionó por los juguetes construidos en latas, alambres y
otros elementos
Desde Valparaíso llegó un matrimonio, junto a tres generaciones de la
familia. Se dieron el tiempo de recorrer las distintas salas y leer
documentos que dan cuenta de la historia y ambos coincidieron en que
hay sentimientos encontramos, por la forma cómo se despliega el museo,
pero también porque da cuenta de mucho sufrimiento y sacrificio de las
familias pampinas. Cristian, el esposo, dijo que “cuando nosotros
estudiamos, leímos la historia por encima, pero las personas que quieren
conocer la historia en las salitreras, tienen que venir acá”.