Su equipo es el único invicto. Ya completó más de una década como DT: “Tengo como filosofía
que, si tengo que esconderme, mejor me voy”.
Pablo Ortega
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Miguel Ponce se encarga de repetir que se toma con mesura lo que hoy está viviendo al
mando de Iquique. Los nortinos escoltan a La Serena y San Luis en el Ascenso y el entusiasmo
aumenta en la ciudad por ver nuevamente al club en Primera División. El DT suma 11 años de
carrera, pasó por varios clubes y también dirigió en Bolivia. Tiene muy claro que el fútbol es
cambiante y, en diálogo con AS, abordó el proyecto que inicia en 2023. También se refirió a
cómo se ha ido formando una mirada propia sobre su labor en la banca.
- ¿Qué tal su vida en Iquique? ¿Tranquilo? ¿De repente va a la playa?
- A mí, me gusta mucho la playa y el sol y todo eso. Sí, voy a la playa y ahora se están yendo a
Santiago los últimos integrantes de nuestras familias, porque todos los del cuerpo técnico
estamos solos acá. Nos juntamos en la playa, vamos a caminar. Bueno, también jugamos
paletas en la playa. Mira, sé que los resultados son importantes, pero cuando las cosas son
negativas y uno no tiene experiencia termina como escondiéndose. Esto es súper simple,
cuando las cosas no funcionan, te echan, te despiden. Así de simple. - Una mirada contraria al hermetismo con que suelen desenvolverse los entrenadores cuando
dirigen… - Mira, yo tengo como filosofía de vida que si tengo que esconderme, mejor me voy. Siempre
lo digo yo, nosotros hacemos una pega en la que si ganas, siempre eres bueno. No hay más
rollo, el contenido lo valoran los jugadores, la gente que está alrededor. Después te siguen
llamando, porque piensan que es la forma apropiada. Trato de llevar una vida muy normal al
trabajo que hacemos. Cuando uno pasa los 50 años no solamente el fútbol, sino que todo lo
ves distinto. A la (Universidad) Católica llegué a los 12 años y ahora, como ser humano, todo lo
ves distinto. Después de una de las experiencias negativas que tuve, me propuse no vivir
escondido. Mejor así no lo vives, esto sigue siendo la pasión y el respeto que uno tiene por la
actividad. - ¿El desempeño del equipo ha sido mejor al esperado?
- Acá han hecho buenos equipos antes, ganaron la Copa Chile, tuvieron participaciones
internacionales, jugaron muy bien además. En un tiempo con Iquique en Primera División, era
muy difícil venir a jugar acá. Estando en la Primera B, claro, hay un presupuesto menor, pero
está la visión. En esto fue importante también tener gran parte del plantel conformado antes
del inicio de la competencia y hubo harto tiempo para trabajar. O sea todos trabajamos, por
supuesto, cada uno en su medida. Teníamos que conformar un plantel nuevo y, cuando
aseguré mi llegada acá, inmediatamente empezamos a hablar de jugadores. - ¿En qué etapa siente que se encuentra como DT?
- Espero que en una posición de madurez para poder conseguir un logro importante en mi
carrera y pasar a otra jerarquía. Estamos recién comenzando, esa es nuestra intención,
estamos en un club ávido de conseguir cosas, especialmente de ascender. Es un lugar que
tiene sus cosas, como muchos otros clubes de la ‘B’, muchos tienen sus complejos (deportivos)
también, pero con lo difícil que es acá en el norte, está impecable. Tenemos toda la
infraestructura que uno necesita, además el estadio (Tierra de Campeones) es manejado por el
club. Hay muchas cosas positivas. - Un contexto propicio entonces para lograr los objetivos buscados…
- Claro, nosotros tenemos una forma de trabajar y es importante contar con las condiciones
adecuadas. Sin embargo, todos en el fútbol necesitamos resultados, más allá de haber hecho
lo que hicimos en La Serena, por ejemplo, donde lamentablemente terminamos saliendo. En
Santiago Wanderers igual… por diferentes motivos, da lo mismo, no los voy a ahondar,
también termino saliendo y sacamos al club de una situación difícil. Logramos una cantidad de
puntos como cuerpo técnico y eso es lo que estamos tratando de hacer acá en Iquique. Mira,
estamos en un buen lugar, en un bonito lugar, con gente muy pro que quiere conseguir logros
y ascender. - ¿Está conforme con la forma de juego? En Iquique el sello ha sido el fútbol intenso, la lucha, ir
para adelante en ofensiva. - Mira, al final los resultados te van a decir cómo estás. Siempre un punto va a ser mejor que
cualquier disconformidad. Hay que aspirar siempre a mejorar, hoy con los resultados que
tenemos y los puntos que también tenemos, pasa lo mismo, hay que tratar de mejorar. Para
sostener esto, porque la clave es que recién está comenzando. Y el último ejemplo de
Magallanes (en la categoría) es decidor. Tuvo una gran ventaja y en un momento estuvo
segundo en la tabla. Era impensado cuando terminó la primera rueda, porque su rendimiento
fue histórico. - Pero están invictos, con tres triunfos y tres empates…
- Es imposible no estar contento con los resultados. En todo comienzo, uno piensa lo mejor y
por supuesto que es un buen inicio. Sabemos que el torneo es largo, pero esto nos ayuda
mucho a todos. Uno se maneja en un ambiente donde hay muchos deseos por subir, de la
gente, de los dueños, del lugar en general.