Cuidar el sueño, usar una mochila y zapatos adecuados, y una
alimentación equilibrada son recomendaciones ad portar de la
llegada de marzo y del nuevo ciclo escolar 2023.
Se acerca marzo, época donde miles de estudiantes retoman su año escolar. Cuatro especialistas
de la salud nos entregan consejos para que la vuelta a clases sea exitosa.
- La importancia del buen dormir: El Dr. Alejandro de Marinis, neurólogo y especialista en Medicina del Sueño de Clínica Universidad de los Andes señala que, “es
necesario que una semana antes de entrar a clases, se empiece a acomodar el horario de
sueño adelantando la hora de acostarse y levantarse 15 minutos por día y mantenerlo de
forma similar durante todo el año.
Es importante considerar que para lograr un sueño reparador se necesitan alrededor de
ocho horas, lo que tiene múltiples beneficios, entre ellos, un mejor rendimiento escolar.
Otro aspecto relevante es no dormir siesta durante el día, para no dificultar el inicio del
sueño a la hora de acostarse, y también disminuir el ritmo de las actividades dos horas
antes”. - Los zapatos y una mochila adecuada: El Dr. Cristián Ortiz, traumatólogo de Clínica Universidad de los Andes, explica la importancia de tener zapatos y una mochila
adecuada. “Cuidar nuestros pies desde pequeños es fundamental, para eso se recomienda
un calzado cómodo y elaborado con productos de buena calidad, que protejan los pies de
lesiones”.
Además, el especialista afirma que es necesario que el zapato sea parecido a una zapatilla
de trote, en el caso de que el colegio lo permita, y también, debiese caber un dedo en la
parte del talón para lograr asegurase de que sea del tamaño adecuado.
Con respecto a la mochila, recomienda que “no debe cargarse más del 5 a 10% del
peso corporal del niño y debe tener un tamaño acorde a la estatura de cada uno, para
que quede por encima de la cintura, no más abajo de 10 centímetros, apoyada en la
zona lumbar. Debe tener tirantes anchos, acolchados y ajustables para cuidar la
espalda y evitar la aparición de enfermedades”. - Las colaciones deben ser saludables y nutritivas: Bárbara Castillo, nutricionista pediátrica, recomienda que las colaciones deben comerse cuando existen
más de cuatro horas entre una comida y otra.
“El objetivo que tienen es evitar la fatiga y controlar el apetito. Hay que evitar
alimentos ultra procesados y altos en azúcares, y optar por productos saludables como
barras de cereales caseras, frutas, bastones de verduras, frutas deshidratadas, frutos
secos, yogurt, jamón de pavo o quesillo. La idea es que sea un snack y no un alimento
muy contundente”. Además, debe ser solo una colación por jornada escolar y no una
colación por cada recreo.

- Bajar la ansiedad de volver a la rutina: Parte de este periodo son la incertidumbre y la ansiedad.
Los niños pueden sentirse ansiosos por muchas cosas diferentes: De hecho es común,
especialmente en los niños que piensan y aprenden de manera diferente. La ansiedad
en algunos niños tiene que ver con los amigos, porque no verán tan seguido a sus
amigos de verano. Esto significa que tendrán que restablecer conexiones con los
amigos de la escuela o hacer nuevos amigos.
La idea de ir en autobús o transporte escolar también puede que sea un problema
para algunos niños. La idea de conocer nuevos maestros es motivo de preocupación
para otros. También podrían sentirse ansiosos acerca de si tendrán la ropa y los útiles
adecuados para la escuela.
La psicóloga infanto-juvenil de Clínica Universidad de los Andes, Susana Saravia,
explica la importancia de involucrar a los niños en este proceso. “Deben sentirse parte
de esta etapa. Para eso pueden elegir los materiales junto a sus papás e, idealmente,
el día anterior que sean los más pequeños los que dejen lista su mochila”.